Dile sí a todos los planes.
Cuanto más salgas, mayor posibilidades de conocer a alguien tendrás.
Ponte a pensar en todo aquello que siempre te ha encantado hacer y para los cuales no has tenido el tiempo necesario.
Cuando la pasas genial, disfrutando a plenitud con la vida, terminas atrayendo la persona que verdaderamente te va. El optimismo es un imán para atraer el amor.
Tienes muy buenos amigos(as), pero ninguno(a) te gusta.
Debes evitar las tentaciones y noches de borrachera en donde puedas involucrarte con alguno(a), por aquello que necesitas “cariño”. Busca nuevos espacios y ¿por qué no? ¡nuevas amistades!
Si eres de esas personas que no van con la idea de coquetear en el gym, inscríbete en algún deporte como paracaidismo, piragüismo… puede que el amor esté en las nubes y qué mejor manera de encontrarlo, que dejando volar la imaginación.
Atráelo(a) hacia ti.
No te quedes con una mirada y una escasa sonrisita de medio lado, pues se interpreta como señal de simpatía más no de coqueteo. Arquea las cejas durante un momento, esto hará que se fije en tu mirada y establezcas contacto visual. Sonríe y concentra la mirada hacia otro lado. Inclina tu cabeza y retoma a mirarle. Estos simples gestos relacionan un “me gustas”.
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